PAra rayzes desto dezimos primeramente,
† que
quiẽ
quien
tiene algun cargo, ha de hazer aquello, que para descargarse bien, cumple
, sin demasiada curiosidad
gl. 1. d. c.
Iudicātem
Iudicantem
.
.
Lo. 2. que el confessor tiene vn cargo principal de la
yglesia y por tanto deue preguntar al penitente lo
q̃
que
cũple
cumple
, y no
mas, segun
aq̃llo
aquello
de S. Aug. referido por Gracian.
y por el Maestro enel quarto
. El
diligẽte
diligente
confessor
pregũte
pregunte
cuerdamẽte
cuerdamente
al pecador lo
q̃
que
por ventura no sabe, o con verguença quiere encubrir.
A loqual añade. S. Th.
q̃
que
el
cōfessor
confessor
deue escudriñar la
cōsciencia
consciencia
del pecador, assi como el medico la enfermedad del enfermo, y el
juez la causa del pleyteante. ¶ Destas rayzes se siguen muchos ramos.
† El primero ser verdad lo que dize Angelo
. y mas largo lo
diximos nos alibi
, conuiene saber, que el confessor es obligado,
so pena de pecado mortala preguntar lo
q̃
que
vee, cree, y aduierte ser
necessario, para
q̃
que
la
cōfessiō
confession
sea entera, y fructuosa, qual es lo
q̃
que
le
paresce,
q̃
que
el
penitẽte
penitente
calla por
ignorācia
ignorancia
,
inaduertẽcia
inaduertencia
, o oluido
.
Porque esto pertenece a su cargo
. Pero no es tal lo que le parece,
que el
penitẽte
penitente
sabe, y aduierte, y no lo dexa por oluido, ni
verguẽ
ça
verguença
. Ca entonces puede creer que no lo hizo, o lo tiene confessado.
Aunque dexar de preguntar por inaduertencia, o oluido, no parece mortal
. ¶ Lo. 2.
† que el confessor deue guardar tres cosas,
que alibi
prouamos. La primera que no pregunte todo lo
q̃
que
puede auer cometido el penitente, sino solo aquello que comunmente, los de su qualidad suelen hazer
. Por lo qual no ha de preguntar al cauallero, de lo
q̃
que
comũmente
comunmente
, solos los Ecclesiasticos hazen,
ni al ecclesiastico, de lo que
comũmente
comunmente
solos los caualleros. Lo segundo que no pregunte, sino de los pecados acostumbrados, que
todos los saben hazer, quales son la transgression de los diez mandamientos, los siete pecados capitales, las faltas de los quatorze articulos dela fe, de los
sacramẽtos
sacramentos
de la yglesia, de las obras de mise|
ricordia, de auer mal guardado los cinco sentidos, y cosas
semejātes
semejantes
, y no de los pecados occultos que los muy maliciosos han inuentado, sino tan cauta y dissimuladamente, y por tales circunloquios, qui si los hizo los diga, y sino los hizo, no los aprenda.