Por mas desatinada, que las tradiciones de los Indios, i aun peor, por que juntamente es erronea, se debe tener i cẽsurar la de algunos z{ Referteos Borrel. de præstan. Reg. Cathol. c. 43. nu. 3. Ego d. c. 9. num. 37. } que han intentado dezir, que por ventura se engendrarian los primeros pobladores de estas provincias, de la tierra, ô alguna putrefaciō de ella, ayuda del calor del Sol, movidos de la dotrina de Auicena, que sintio, que esto era possible, la qual, por lo menos en quanto à la formacion del cuerpo, procura defender nervosamente Andres Cesalpino. a{ Auizena apud Cesalpin. lib. 1. peripat. quæst. q. 1. Ego d. c. 9. n. 37. }Pero està reprobada con razon por graves Theologos i Filosofos, b{ Averroes, & alij, quos referunt Conimbricẽ. in 2. de cœlo, c. 3. q. 6. ar. 3. & 4. Borrel. vbi supr. Ego d. c. 9. ex n. 37. }los quales cōvienen, en que de la putrefacion pueden criarse animales, que llaman imperfectos, ò insectos, como moscas, gusanos, ranas, ratones, i otros de este genero, segũ lo enseña Aristoteles, i otros Autores, c{ Arist. lib. 1. de hist. anim. c. 1. & 19. & alij apud Maiol. 1. to. colloq. 5. de insectis. }Pero no los perfectos, especialmente el hombre, q̃ es perfectissimo, i en quiẽ es de fè, que para que pueda tener i merecer nombre de tal, ha de proceder del semen prolifico de sus padres, i derivarse del que lo fue de todos Adan. d{ Abulens. parad. 1. c. 36. Macrob. Mariana, Delrius, & alij apud Me, d. c. 9. ex n. 38. Lipsius in Phisiolog. lib. 3. c. 6. & 7. }