Lo qual, segun la opinion de los que mejor sientẽ, procedia, de que aunque en aquellos siglos avia ya alguna experiencia en la navegacion, cuyo uso comẽçò desde Noe, que amaestrado en lo de la Arca, fue el primero, que la introduxo, i despues Atlante Lybico, i otros la fueron adelantando. z{ Genes. 7. Ioseph. 5. antiq. Clem. Alex. 1. strom. ca. 7. & alij apud Me, d. c. 11. nu 70. & seqq. }Toda via, era solo de costa en costa, sin atreverse à engolfar en alto, i mas en mar tan profundo, borrascoso, i dilacado, como el del Oceano Atlantico, como entonces no avian aprẽdido ā hazer naves à proposito para esto, ni conocido el uso del Astrolabio, i de otros instrumentos nauticos, sin los qual es era forçoso, q̃ erraran, i peligraran en semejantes navegaciones. I especialmente careciẽdo de la noticia, i uso de la Aguja de marear, i singulares, i maravillosos efectos, que en ella obra la Piedra Imàn.