Cō lo dicho queda probado bastantemente, mi intẽto, i satisfechas las objeciones, que se pueden, i suelen traer en contrario. Pero resta una, que por mas considerable la he dexado para la postre. I es, que no se puede decir, que de este Nuevo Orbe no tuviessen noticia los Antiguos, pues ay muchos que afirmā, que no so la tuvieron, sino que Salomō embiava à el todos años las poderosas Armadas, q̃ despachava de Asiongaber con las naves, i siervos del Rey Hiràn, i que de alli le bolvian cargadas de oro, plata, piedras preciosas, pavos, i simias, i otras cosas de estima, de que haze mencion la sagrada Escritura. y{ 3. Reg. 9. & 4. 22. & Paralipom. 9. & 20. & alibi sæpè. } Por manera, que este era su Ophir tan celebrado; el qual por otro vocablo en la mesma Escritura llamā Parvaijm, i de aqui, esforçādo mas sus conjeturas, se alargan à pensar, que tomaron el nombre las ricas, i dilatadas Provincias del Perù, ò de la palabra, Ophire, ô Opire, mudadas, como es ordinario, ò traspuestas algunas letras, i en ellas, i en las de la Nueva España, quierẽ constituir el Ophir, i verificar lo que se escrive de sus grādezas. z{ Arias Montanus In Phaleg. Vatablus, Genebrar. Ortel. Pontius, & plures alij apud Greg. Garcia de Ind. orig. lib. 1. ca. 2. §. 3. & 4. & larius lib. 4. c. 1. & seqq. & apud Me lib. 1. c. 13. n. 4. & seqq. }Como aun el mesmo Don Christoval Colon lo comẽçò à hazer en la Isla Española, luego que la descubrio, i reconocio, alabandose, que avia hallado la Region Ophira, como Pedro Martyr afirma, que se lo oyô dezir muchas vezes. a{ In decad. de Novo Orb. Vatablus libro 3. Reg. c. 9. & 22. }