A que se añaden los divinos impulsos, inspiraciones, ò revelaciones, i las previas disposiciones con que Dios fue assimesmo llamando, disponiendo, i moviẽdo à nuestros Reyes, para q̃ tratassen destas empressas; i à don Christoval Colon, para que con tan gran reson i conato, porfiasse en proponerlas, i executarlas.