Desuerte, que no se deben estrañar los repartimientos i apremios que aora se hazen, ni que sean tratados en esta parte con alguna aspereza, los que sin ella, no se aplicaràn à cosa de provecho, i trabajo, como casi pintandolos, lo da à entender Trajano Bocalini en uno de sus Raguallos del Parnaso, t{ Bocalin. centur. 1. rag. 8. dōde despues de contar la fabula, pone las palabras q̃ aqui se refieren. }en que refiere la quexa que los asnos dieron à Apolo, cerca de los malos tratamientos, que recebian, i que èl setenciò, que eran dignos de ellos, pues por su natural flogedad, no hazian cosa de otra manera: "I que los que quisiessen hazer juizio exacto de las crueldades q̃ viessen obrar contra otros, era necessario, que no mirassen tanto el genio, ò ingenio del que las usaba, como la calidad de las costumbres del que se quexaba de ser maltratado."