Lo qvarto haze por esta opinion, que aunque los Encomenderos siendo perpetuos, i mas ricos, tendran mas obligacion a mirar por la defensa, i conservacion de las Indias, como se pondera por la parte contraria; tambien se puede temer, i recelar, que essas mesmas riquezas, i comodidades en que se hallaren, no los hagan mas viciosos, i sobervios, i menos afectos i atentos al amor i servicios de nuestros Reyes, i de sus mandatos, pareciendoles, que ya no tienen mas que pretender, ni esperar de sus Reales manos para si, ni para sus descendientes; lo qual es muy conveniente que se mire con cuidado en todas Provincias; pero con mas particular atencion en las de las Indias, que estan tan remotas, i apartadas de la Real presencia, i en que conviene procurar por todos los medios que fueren possibles, que los subditos esten muy dependientes de su Rey, i que unos i otros Reinos, aun que tan distantes, i apartados por mar, i tierra, i de climas, i constelaciones tan diferentes, hagan un cuerpo, i se animen con una alma, i esperen de ella sola sus influencias, i conveniencias.