I supuesto, que ningun Medico cuerdo i prudente, procurando la salud del cuerpo enfermo, usarà de remedios, en que vaya dudoso, si pueden convenir para mejorarla, ò que sean mas graves, i peligrosos, que la mesma enfermedad que pretende sanar, i evitar. y{ Iustin. in au thent. hæc cōstitutio, collat. 8. Pet. Gregor. libr 1. de Republ. cap. 1 n. 10. }Esso mesmo debẽ imitar i procurar los q̃ hazen leyes para el govierno de las Republicas, como lo dixo el Emperador Iustiniano, alabado sumamente en esta parte por Pedro Gregorio. Porque lo demas es ir contra el Aforismo de todos los Politicos, que enseñan, z{ b. Quintil. declam. 14. §. 1. Ovid. 3 de Pōto, eleg 7. Tacit. 34. annal. & lib. 4. historiæ Scipio. Ammirat. ad eund. lib. 3. discur. 2. per tot. }q̃ nunca son buenos los remedios en que puede peligrar la Republica tanto ò mas, que en los daños, que se pretendian atajar con ellos; i que ay males, que se hazen mayores, si pretẽdemos curarlos, i q̃ su unico remedio (como lo dixo el Tacito) consiste, en no buscarles remedio.