LA intencion, i razon, que obligò à introducir estas Encomiẽdas, que fue como avemos dicho, la remuneracion de los benemeritos, obligô tambien à sacar de ellas un genero de pensiones, ò erogaciones particulares, de que pienso tratar en este capitulo. I ocasionaron se, de que como eran muchos los benemeritos, i las Encomiendas cada dia iban à menos, como los Indios, parecio conveniente, que se proveyessen desuerte, que el aprovechamiento dellas alcançasse à los mas que pudiesse.