I esto (segun otra grave sentencia de Plinio Iunior, z{ Plin. Iun. libro 2. epist. 9. ibi: "Licet fidos in præsentia, quibus resistit, videatur offendere, deinde illis ipsis suscipitur laudatur́." }) aunque puede ser, que por entonces les cause algun desabrimiento, despues, ellos mesmos lo reciben, i alaban por agradable servicio. I assi el Sabio Rey de Aragon don Alonso Primero solia dezir, (como lo refiere Antonio Panormitano, a{ Ant. Panormita. lib. 4. de vit. & fact. Alfon. I. }) que aquellos Consejeros le eran mas agradables, i amados, que temian mas à Dios, que no à èl. Porque, como tambien nos lo adviertẽ algunos Textos, i por autoridad dellos Paulo de Castro, b{ Cap. nemo 81. 11. q. 3. l. 1 vers. Nec eos, Cod. de stat. & imaginib. ubi Paul. Castren. }mejor es, recebir castigo por la verdad, que mercedes por la mentira, i adulacion, la qual en los Consejeros de los Principes es cierta especie de traicion. A que parece aver aludido Nicetas Choniatas, c{ Nicet. 1. anna in Andron. Comneno. }quando dixo, que los Aduladores deben ser tenidos, i castigados mas, que los detractores, i calumniadores. Cuya sentencia siguen, i ilustran con otras muchas, Simancas, i otros Autores. d{ Simanc. de Republ. lib. 3. c. 13. Gerson Panvin. Medices, Vanocius Harnisæus, & alij apud D. Valenz. cons. 99. n. 76. & sequent. & cons. 162. ex nu. 49. & Me tom. 1. lib. 2. cap. 1. in fine. }