A DON LORENZO RAMIREZ DE PRADO, DEL Consejo del Rey nuestro senor, en el Supremo de las Indias, i Embaxador en Francia. H ONRAR V. Senoria los estudios, efeto es del lucimiento, que los suyos en Espana, i fuera della han merecido i logrado: pues nunca estima tanto los agenos, quien profes sa menos los propios. Por favorecer los mios, aunque humildes, conociendolos tan inclinados a las materias de Indias, se sirvio de mandarme, que en un memorial le propusies se, lo que por leyes, cedulas i ordenancas Reales esta dis puesto, i se pratica en aquellas Provincias, en Encomiendas i mercedes, ventas i renunciaciones de oficios, i otros casos, de que al Supremo Consejo, en que V.S. tan dignamente assiste, acuden a sacar confirmacion, por ser estos los despachos mas fre quentes, i de cuya formalidad i derecho se requiere mas entera, i especial noticia. Intente, obedeciendo, satissazer al mandato, i luzjo tanto en la obra, que me necessito a que reformando el titulo, i alterando la disposicion, el que comenc o memorial acabas se libro. Estudio as segura el discurrir por tantas, i tan diferentes Provincias, i reducir a principios ciertos, i reglas generales, derecho tan irregular, como el de las Indias. Que si bien los anos, que en su inteligencia he gastado, aun a los ojos, i orden de sus mas prudentes legisladores, me pudieran dar alguna luz; hallanse tan indigestas i confusas las materias legales i politicas de aquellos Reynos, por no aver comencado ninguno a tratar dellas; i es tan dudoso el acierto en los primeros descubridores, que pudiera reusar el parecerlo en estas, a no animarme el patrocinio de V.S. pues nacio tan suya esta obra, que primero que el ser, tuvo el amparo, privandome del merito de la eleccion. I en tanto que el gravissimo cargo, con que los negocios de la Catolica Corona de Espana, por mayor acierto de sus resoluciones, detienen a V.S. en la Cristianissima de Francia, para que los estrangeros reconozcan, que copio de si mismo las calidades, que tan docto ensen o neces sarias en los Consejeros de los Reyes: admita en voluntad grande, dichoso logro de pequeno caudal; para que favorecida de V.S. manifieste la menor obra, ciertos indicios del mayor deseo. Guarde Dios a V. S. i trayga felice, con los aumentos, que merece. Madrid 6. de Iulio de 1628. De V.S. criado i servidor. El Lic. Antonio de Leon.