¶ Mucho ſon de culpar los confeſſores que ſabiendo que ſon juezes ſe contentan con auer hecho bien eſte officio, examinando y penitenciando y abſoluiendo de lo paſſado, oluidados que por ſer tambien medicos de los penitentes no han de alçar mano dellos, ſin darles algunos remedios preſeruatiuos de los males en que pueden caer. Y de aqui es que como enfermos mal curados luego tornan a recaer, y aſsi el trabajo paſſado es en vano, y la recayda peor que la cayda. Y pueſto que aya algunos remedios tocar ſe an algunos.